¿Sabías que una ventilación adecuada del interior del hogar produce mejoras en la salud emocional?
𝗖𝘂𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗿𝗲𝘀𝗽𝗶𝗿𝗮𝗺𝗼𝘀 𝗮𝗶𝗿𝗲 𝗹𝗶𝗺𝗽𝗶𝗼 lo hacemos de forma más lenta y profunda, y el cuerpo permanece más tranquilo y relajado.
La respiración profunda de aire sano y limpio produce cambios en cambios en la corteza cerebral: 𝗡𝗼𝘀 𝘁𝗿𝗮𝗻𝗾𝘂𝗶𝗹𝗶𝘇𝗮, 𝗻𝗼𝘀 𝗮𝘆𝘂𝗱𝗮 𝗮 𝗴𝗲𝘀𝘁𝗶𝗼𝗻𝗮𝗿 𝗹𝗮𝘀 𝗲𝗺𝗼𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀, 𝗽𝗿𝗲𝘃𝗶𝗲𝗻𝗲 𝗲𝗻𝗳𝗲𝗿𝗺𝗲𝗱𝗮𝗱𝗲𝘀 𝗰𝗼𝗺𝗼 𝗹𝗮 𝗵𝗶𝗽𝗲𝗿𝘁𝗲𝗻𝘀𝗶ó𝗻 𝘆 𝗻𝗼𝘀 𝗮𝘆𝘂𝗱𝗮 𝗮 𝗱𝗼𝗿𝗺𝗶𝗿 𝗺𝗲𝗷𝗼𝗿.
En cambio, el 𝗮𝗶𝗿𝗲 𝗱𝗲 𝗺𝗮𝗹𝗮 𝗰𝗮𝗹𝗶𝗱𝗮𝗱 produce respiraciones rápidas y superficiales que favorecen emociones como la 𝗮𝗻𝘀𝗶𝗲𝗱𝗮𝗱, el 𝗺𝗶𝗲𝗱𝗼 o el 𝗲𝘀𝘁𝗿é𝘀.Infórmate sobre estos y otros efectos de los sistemas de ventilación controlada: https://humesec.es/tratamiento-de-la-calidad-del-aire/