
En los hogares pueden aparecer distintos tipos de hongos, sobre todo en zonas con humedad, condensación o falta de ventilación. Los más comunes son:
🔹 Hongos microscópicos (moho)
Estos son los que se ven como manchas negras, verdes, blancas o anaranjadas en paredes, techos o muebles:
- Aspergillus: muy común, aparece en paredes y superficies húmedas. Algunas especies pueden ser tóxicas.
- Penicillium: suele ser verde-azulado, crece en paredes, alimentos y materiales húmedos.
- Cladosporium: forma manchas negras o marrones, incluso en superficies frías como ventanas o marcos metálicos.
- Stachybotrys chartarum (“moho negro”): asociado a humedad crónica; produce manchas negras verdosas y desprende un olor fuerte a moho.
🔹 Hongos en materiales y estructuras
- Levaduras (como Candida): no siempre visibles, pero pueden colonizar superficies muy húmedas.
- Moho en madera: algunos hongos lignívoros como Serpula lacrymans (hongo de la pudrición parda) degradan vigas y suelos.
🔹 Hongos visibles en objetos cotidianos
- En ropa y cuero: manchas blanquecinas o verdosas por moho (Aspergillus o Penicillium).
- En alimentos: pan, fruta y queso pueden colonizarse por mohos verdes, azules o negros (ej. Rhizopus, Penicillium).
Factores que favorecen su aparición
- Condensación por diferencia de temperaturas.
- Falta de ventilación.
- Filtraciones o humedades en paredes.
- Materiales porosos (madera, yeso, cartón, textiles).
👉 Estos hongos no solo dañan la vivienda (manchas, malos olores, deterioro de materiales), también pueden afectar a la salud (alergias, irritación respiratoria e incluso infecciones en personas sensibles).